Mientras navegamos por el sagrado río Nilo, contemplando el paisaje de la tierra de los faraones a punto de llegar a territorio Nubio, el año acaba.
Hoy es el último día de este 2014, año de la crisis, corruptelas, de las tarjetas black y demás líos políticos.
Ante mis ojos el río fluye, mientras me muestra los paisajes de esta tierra bañada por el río y por el tibio sol del invierno.
Y desde aquí os quiero desearos a todos un feliz año nuevo.
Que el nuevo sol, recién nacido, ese que calienta ahora mi cuerpo, nos llene de luz y calor, para que nuestra nueva cosecha personal sea provechosa y abundante.
Eso os deseo, junto a un buen montón de deseos cumplidos y sueños realizados para este nuevo año que llega. Se encargarán los Reyes Magos de hacerlo realidad.
El Nilo me sirve en estos días para tomar conciencia, lejos del ruido de las fiestas del fin de año, de que la vida sigue fluyendo llena de abundancia.
Y un poco de todo ello nos pertenece. FELIZ AÑO NUEVO PARA TODOS.
Nos encontramos en breve en este Espacio en Blanco.
Miguel Blanco.
Emoticon Emoticon